La madrugada de este martes se confirmó la muerte de un adolescente de 17 años tras caer a un pozo de aproximadamente 30 metros de profundidad en Curacaví, Región Metropolitana.
En el lugar trabajaron más de 15 voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Curacaví, quienes lograron recuperar el cuerpo del joven confirmaron que ya se encontraba sin vida.
Según información preliminar, la víctima estaba con un amigo de 14 años y decidieron cruzar por un recinto privado para tomar un atajo, lugar donde uno de los menores cayó en el pozo.
El teniente de Carabineros, Gonzalo Rivera, explicó que "el recinto se encontraba cerrado completamente. Estaba cercado y no era un paso habilitado para el tránsito. No se mantenía algún tipo de señalética o algún tipo de cartel de alerta".
"Descendieron dos rescatistas en el cual realizaron las maniobras para la extracción del paciente, el que es posteriormente extraído hacia arriba. Personal de salud constató y dio las señales de que el cuerpo lamentablemente estaba sin vida al llevarlo a la superficie", detalló el capitán de Bomberos, Filippo Guiñez.
