El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el exvicepresidente demócrata Joe Biden iniciaron el martes en Cleveland, Ohio, su primer debate televisado, cuando faltan 35 días para una elección presidencial muy tensa.
No hubo apretón de manos cuando los dos septuagenarios subieron al escenario y, si bien esto se debió a las restricciones por la pandemia de COVID-19, la ausencia del saludo tradicional simbolizó la profunda división en el país en la cuenta regresiva hacia el 3 de noviembre.
Trump llegó al debate a la ofensiva, decidido a recuperar terreno frente a su rival, que lo aventaja desde hace semanas en los sondeos, y defendió su decisión de llenar la vacante que dejó en la Corte Suprema el fallecimiento de la jueza Ruth Baden Ginsburg con una jueza conservadora.
Después acusó a Biden de ser "socialista", pero Biden desestimó sus ataques afirmando que "todo el mundo sabe" que Trump "es un mentiroso".
"No hay nada inteligente en ti", le respondió el mandatario en otro segmento.
Agresivo cruce de palabras
"El hecho es que todo lo que está diciendo hasta ahora es simplemente una mentira. No estoy aquí para gritar sus mentiras. Todo el mundo sabe que es un mentiroso", dijo Biden sobre el mandatario republicano.
Ante las continuas interrupciones y burlas de Trump, pese a los intentos de Wallace de que se respetaran los tiempos de palabra, Biden se quejó: "Es difícil hablar con este payaso, perdón, esta persona".
El debate se celebró en Ohio, uno de los estados pendulares que cambian su preferencia de una elección a otra y que Trump logró ganar en 2016. Ahora, Biden encabeza las encuestas en este bastión con un 49% de las preferencias, frente a 45,7% de Trump.
La pandemia -que ha dejado más de 204.762 muertos en el país- marcó el desarrollo del debate, y en el auditorio los escasos presentes -salvo Trump y Biden y el moderador - portaron mascarillas y las sillas estuvieron colocadas para respetar el distanciamiento social.
Biden criticó la gestión de Trump de la crisis y eligió tocar una fibra emocional para motivar a los votantes.
"¿Cuántos de ustedes se levantaron esta mañana y tenían una silla vacía en la cocina porque alguien murió de Covid-19", planteó el exvicepresidente de Barack Obama.
El cierre de un caótico debate
Si se confirman las encuestas, Trump podría convertirse en el primer presidente estadounidense en no lograr un segundo mandato desde que su correligionario George H. W. Bush perdió frente a Bill Clinton en 1992.
Trump perdió en los últimos meses su principal activo político: una gestión de la economía que llevó al desempleo a mínimos en décadas, pero que quedó devastada por la pandemia que destruyó millones de puestos de trabajo.
A última hora una bomba cayó sobre los republicanos: las revelaciones del diario The New York Times de que Trump pagó sólo 750 dólares en impuestos federales en 2016, el año que ganó la presidencia.
El artículo indicó también que las empresas de Trump sufren "pérdidas crónicas", algo que puede resquebrajar su imagen de poderoso hombre de negocios.
Biden respondió este martes publicando documentos que indican que pago casi 300.000 dólares en impuestos el año pasado. "El pueblo estadounidense merece transparencia", indicó.