En la ciudad china de Kunming se llevó a cabo una escena digna de Hollywood, puesto que las autoridades locales decidieron derrumbar 15 rascacielos de manera simultánea. Una operación que llevó semanas de preparación y la evacuación de residentes cercanos.
Esta demolición masiva se debe al deterioro y abandono de la obra, puesto que los edificios eran parte de un macroproyecto urbanístico que nunca terminó de hacerse. Es más, de todo el plan, sólo se logró entregar cuatro torres, quedando el resto a medio terminar.
Según señala una publicación del medio local Taiwan News, la empresa a cargo inició los trabajos en 2011, pero quebró en 2013 dejando las estructuras sin terminar.
Demolición con fallas
Dado el video, se pudo ver que a pesar de lo espectacular de la operación no fue del todo exitosa, ya que quedó un rascacielos en pie e inclinado.
A pesar de esto último, no se registraron mayores problemas o daños a las viviendas cercanas, por lo que los encargados de la demolición deberán llevar a cabo una última operación para terminar con el edificio restante.