Siete niños huérfanos de un padre noruego y una madre sueca, pero de origen chileno, quedaron abandonados luego que ambos murieran en Siria tras en listarse en las filas del ISIS. Es por eso, que su abuelo busca traerlos a Chile.
Patricio González, padre de la mujer, y que está radicado en Suecia viajó hasta el campamento donde están los menores, comprobando que sufren desnutrición.
"Están con problemas pulmonares, tienen fiebre, es muy terrible la situación de los niños. Yo quiero sacarlos de ahí lo más pronto posible porque es una situación de emergencia donde cada día está muriendo un niño en ese campamento", explicó.
Cuatro de los menores son de nacionalidad sueca y tres de ellos son apátridas. El traslado a Suecia se vería complicado, dado que ellos son hijos de terroristas, por lo que la familia realiza una serie de diligencias para traerlos a Chile.
El canciller Roberto Ampuero aseveró que "dadas las especiales circunstancias, Chile está dispuesto a colaborar y está colaborando. Esta mañana estuvo el abuelo de estos niños en Cancillería hablando con nuestra dirección de asuntos consulares".
