Una de las pocas y peligrosas opciones para rescatar a los 12 niños y su entrenador atrapados en una cueva en Tailandia es buceando. Pero varios de ellos no saben nadar y para sobrevivir deberán aprender a bucear en una cueva oscura. Es por lo que un grupo de soldados ya les enseña clases aceleradas de natación y buceo.
El Capitán de Carabineros Luis Torres, quien es buzo táctico, señaló en T13 que una de las alternativas más arriesgadas o la última alternativa es que los menores salgan buceando.
Explicó que la decisión de adelantar la enseñanza de buceo se puede explicar porque "tal vez la cueva donde se encuentran ha disminuido la presión parcial de oxígeno y está aumentando CO2 en el interior y eso, por supuesto, que puede provocar serios daños a los menores que se encuentran en el interior".
Para realizar la operación, Torres señaló que él usaría un equipo con máscara "full face", para que todo el rostro del menor quede cubierto por la máscara y así pueda respirar al mismo tiempo tanto nasal como bucalmente, y de esa manera disminuir los niveles de estrés. Algo distinto al buceo tradicional que no usa una máscara completa.
A esto se suma que una de las complejidades es enseñar a los menores a respirar adecuadamente en condiciones adversas como las que se encuentran. Y es que en caso de salir de esta forma, tendrían que hacerlo de manera "ciega", guiados probablemente a través de una cuerda.
En la misma línea aseguró que la decisión que se debería tomar es "suministrar alimentación, oxígeno y contención, pero los dejaría dentro de la cueva hasta que baje el agua".
"No los sometería al riesgo de salir buceando en todo ese trayecto", remarcó.