Una solicitud abierta al gobierno de Venezuela a que "se eviten o se suspendan las iniciativas en curso como la nueva Constituyente", hizo hoy el Estado Vaticano, que a través de un comunicado calificó además la Asamblea Constituyente como una medida que "más que favorecer la reconciliación y la paz, fomena un clima de tensión y enfrentamiento e hipotecan el futuro".
El Vaticano mostró además "su profunda preocupación por la radicalización y el agravamiento de la crisis en la República Bolivariana de Venezuela, por el aumento de los muertos, de los heridos y de los detenidos. El Santo Padre, directamente y a través de la Secretaría de Estado, sigue de cerca dicha situación y sus implicaciones humanitarias, sociales, políticas, económicas e incluso espirituales, asimismo asegura su constante oración por el país y por todos los venezolanos, mientras invita a los fieles de todo el mundo a rezar intensamente por esta intención".
En tanto, agregan una solicitud para que "se creen las condiciones para una solución negociada de acuerdo con las indicaciones expresadas en la carta de la Secretaría de Estado del 1 de diciembre de 2016, teniendo en cuenta el grave sufrimiento del pueblo a causa de las dificultades para obtener alimentos y medicamentos, y por la falta de seguridad".
Finalmente, la Santa Sede llama a la sociedad venezolana a que "sea evitada toda forma de violencia, invitando en particular, a las fuerzas de seguridad a abstenerse del uso excesivo y desproporcionado de la fuerza".