Una familia demandó a una funeraria afirmando que el cuerpo que enterraron en el cementerio Perry Mount Park Cemetery de la ciudad de Pontiac (Míchigan, EE.UU.) no era el de su padre, reclamando 85 millones de dólares por el hecho.
El hombre falleció en junio pasado a los 64 años, y desde un primer momento la familia reclamó que el cuerpo que estaban enterrando no pertenecía al de su ser querido.
"Todavía estoy en shock" dijo uno de los hijos del hombre fallecido a Fox 2, "Intentamos detener el funeral, tratamos de advertirles varias veces, este no es mi padre. No escucharon, todavía no están escuchando este día", agregó.
La familia decidió imponer una demanda de 10 millones de dólares por daños más 75 millones por fraude malicioso, negligencia grave e infligir intencionalmente angustia emocional.
La abogada demandante explicó que "no se trata realmente del dinero, es por la angustia emocional su familia, sus hermanos han tenido que atravesar".
En tanto, desde la casa funeraria se limitaron a responder que las "Investigamos las acusaciones y absolutamente no son ciertas".