Así lo afirmó este viernes el director ejecutivo de la agencia espacial rusa Roscosmos, Serguéi Krikaliov. "Aún no hay versiones definitivas. Lo que está claro es que las causa directa fue una colisión de un elemento lateral, parte de la primera etapa (del cohete). Al separarse, de hecho, se produjo un contacto entre la primera y segunda etapas", dijo Krikaliov, citado por la agencia oficial rusa RIA Nóvosti,
Agregó que Roscosmos no descarta que el cohete "se haya desviado de la trayectoria programada y se haya destruido la parte inferior de la segunda etapa".
Krikaliov indicó que se espera que para el próximo día 20 la comisión gubernamental que investiga el accidente ofrezca resultados preliminares de su labor.
"Los primeros fragmentos (del cohete) recuperados en la estepa kazaja ayudarán a establecer las causas de la avería", añadió.
Astronauta alemán Alexander Gerst, a la espera en la EEI
El Comité de Emergencia del Ministerio del Interior de Kazajistán informó hoy de que a unos 40 kilómetros de la ciudad de Zhezkazgán fue hallado un fragmento de la Soyuz M-10, que fue entregado a los especialistas de Roscosmos.
Krikaliov subrayó que todos los lanzamientos de cohetes Soyuz -FG o similares han sido suspendidos hasta que se establezcan las causas de la avería del jueves.
"Posiblemente será aplazado el lanzamiento del carguero Progress (programado para el 31 de octubre) y puede ser adelantado el de la próxima (nave tripulada) Soyuz (previsto para el 20 de diciembre)", dijo.
El director ejecutivo de Roscosmos indicó que la Estación Espacial Internacional (EEI ) puede funcionar en régimen automático, sin tripulación, pero recalcó que se hará todo posible por evitar ese extremo.
Actualmente, en la EEI se encuentran el comandante de la plataforma Alexander Gerst de la Agencia Espacial Europea (ESA), la ingeniero de vuelo de la NASA Serena Auñón-Chancellor y el también ingeniero de vuelo de Roscosmos Serguéi Prokópiev.