El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, prometió el lunes suministrar petróleo a sus aliados luego de los ataques a la infraestructura petrolera en Arabia Saudita, que Washington atribuyó a Irán.
"Somos un exportador neto de energía y ahora el productor de energía número uno en el mundo", tuiteó el mandatario.
"No necesitamos el petróleo y el gas de Medio Oriente y en realidad tenemos muy pocos cargueros allí, pero ayudaremos a nuestros aliados", añadió.
Trump anunció el domingo por la noche que autorizó el uso de reservas estratégicas de crudo de Estados Unidos "si es necesario" para compensar la disminución de la producción saudita.
Estados Unidos es el principal productor mundial de petróleo crudo, con un promedio de 12,4 millones de barriles por día, según el último informe semanal de la Administración de Información Energética de Estados (EIA).
Si se cuenta también el petróleo procesado en sus refinerías, Estados Unidos suministró en promedio en 2018 casi 18 millones de barriles de crudo y productos refinados por día.
Arabia Saudita es el mayor exportador mundial de crudo y compite con Rusia por el puesto de segundo mayor productor.
El precio del petróleo se disparó el lunes tras el ataque contra infraestructuras petroleras sauditas el sábado, que redujeron a la mitad la producción del país y acentuaron los temores de escalada militar entre Estados Unidos e Irán.
Los bombardeos fueron reivindicados por rebeldes hutíes de Yemen, que se enfrentan desde hace cinco años a una coalición militar liderada por Arabia Saudita y cuentan con el respaldo de Irán.
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo, acusó a Irán de estar detrás de este ataque, y Trump dijo el domingo que Estados Unidos estaba listo para defenderse.