El sucesor escogido por el presidente filipino, Rodrigo Duterte, anunció el martes su retiro como candidato a las elecciones presidenciales de 2022, al afirmar que "no es mi momento".
El senador Christopher Go, allegado de Duterte, entró a la contienda electoral dos días antes del vencimiento del plazo de inscripción el 15 de noviembre, después de que se inscribió previamente como candidato a la vicepresidencia.
Duterte está vetado por la constitución para disputar un segundo mandato de seis años, y en su lugar está de candidato al Senado.
"Mi familia tampoco lo quiere, así que pensé que tal vez no es mi momento", declaró Go a periodistas.
Go indicó que con la decisión de retirarse buscó evitarle "más problemas" a Duterte, a quien dice amar "más que a un padre".
La mayoría de los analistas le daban a Go pocas opciones de ganar las elecciones de mayo, aunque era visto como el candidato que más protegería a Duterte de cargos criminales en el país y la Corte Penal Internacional por su mortal guerra contra las drogas.
"Desde el inicio lanzó una campaña tibia y era obvio que fue puesto de candidato por el presidente Duterte", dijo Jean Franco, profesor de ciencias políticas de la Universidad de las Filipinas.
El hijo y tocayo del exdictador Ferdinand Marcos aparece como favorito en la contienda, según un reciente sondeo de la encuestadora Social Weather Stations.
Le siguen Leni Robredo, actual vicepresidente y crítico de Duterte, el alcalde Francisco Domagoso y la estrella del boxeo Manny Pacquiao.
Se esperaba que Sara Duterte, hija del presidente, buscara sucederlo en el cargo, pero se postuló a vicepresidente en una alianza con Marcos.
