AFP
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, insistió este domingo en que no habrá una mesa de diálogo formal con la guerrilla ELN hasta que esa organización no libere "sano y salvo" a un excongresista que mantiene cautivo.
"El tema del ELN es muy claro, hasta que yo no vea a Odín Sánchez libre, sano y salvo no va a haber reunión con el ELN; así de claro y así de sencillo", dijo Santos en la caribeña ciudad de Barranquilla, donde estrenó obras educativas.
El viernes el jefe de la comisión negociadora del Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista), Pablo Beltrán, aseguró que la libertad de Sánchez se producirá en el "transcurso" de la primera ronda de negociaciones con el gobierno.
Beltrán, nombre de guerra de Israel Ramírez, aseguró que durante las conversaciones preparatorias de la mesa formal hubo un compromiso de liberar al excongresista, pero sin una fecha formal que indicara que debía ser antes del inicio de la negociación.
El gobierno de Santos aplazó el jueves la instalación formal en Quito de los diálogos de paz hasta que el excongresista no sea entregado.
Tras esa instalación, estaba previsto el inicio de las conversaciones el 3 de noviembre en un club social universitario en la localidad de andina de Sangolquí (25 km al este de Quito) durante unos 45 días.
Las negociaciones con el ELN se desarrollarán en Ecuador, Venezuela, Chile, Brasil y Cuba, garantes de los diálogos junto con Noruega.
Desde el mismo día de la suspensión de las conversaciones se indicó que la liberación de Sánchez estaba en camino, pero aún se desconoce la fecha y el lugar exacto en que recuperaría la libertad.
Sánchez, de 61 años, oriundo del selvático y remoto Chocó (noroeste), se intercambió en abril por su hermano enfermo Patrocinio, quien estaba en poder del ELN.
Colombia llora más de 260.000 muertos en medio siglo de violencia fratricida, que ha involucrado a guerrillas, paramilitares y agentes de la fuerza pública.