El ex primer ministro italiano, Matteo Renzi, manifestó hoy su intención de continuar al frente de su Partido Democrático, pese a reconocer su "super derrota" en el referéndum sobre una reforma constitucional del pasado 4 de diciembre.
"Para nosotros no fue una derrota, fue una súper derrota. Punto final", dijo en una asamblea del PD en Roma. Renzi dimitió como jefe de Gobierno tras la victoria del "no" a su propuesta de reforma de la Carta Magna y fue reemplazado por el hasta entonces ministro de Exteriores, Paolo Gentiloni, un estrecho aliado.
Renzi dijo que no intentará convocar un partido del congreso de forma anticipada con el fin de buscar su reelección al frente del partido, alegando que eso dividiría demasiado al grupo.
Renzi, de 41 años, lidera el PD desde finales de 2013 y podría volver a ser candidato en unas parlamentarias, pero ahora tiene muchos rivales internos en el partido, sobre todo entre los ex comunistas del ala más a la izquierda. Además, consideró que la prioridad es acabar con el bloqueo que existe en la normativa que regula el voto en Italia, el mayor obstáculo para las nuevas elecciones que deben celebrarse como tarde a comienzos de 2018.
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