Desde el año 2012 el número de niños utilizados en conflictos armados en todo el mundo se ha más que duplicado, con un aumento del 159% y casi 30 mil casos de reclutamiento verificados, según reveló Child Soldiers International.
La ONG analizó los informes anuales publicados por las Naciones Unidas entre 2012 y 2017 sobre "Niños y Conflictos Armados", en el marco del Día Internacional contra el Uso de Niños Soldados, que se conmemoró el 12 de febrero.
El análisis revela un total de 29.128 casos verificados de reclutamiento de niños en 17 países con una tendencia al alza. El informe de 2018, que abarca el año 2017, detalla 8.185 casos verificados en 15 países, un aumento del 159% en el informe de 2013, que detalla 3.159 casos en 12 países durante 2012.
La explotación de las niñas también está aumentando. Las niñas asociadas con grupos y fuerzas armadas totalizaron 893 en el informe de 2018, cuatro veces más que los 216 registrados en 2017.
Sin embargo, como las niñas se utilizan en gran medida para desempeñar funciones de "apoyo" y se las mantiene alejadas de las líneas del frente, a menudo no son percibidas como asociadas por actores o comunidades armadas.
En consecuencia, según Child Soldiers International, las niñas suelen quedar fuera de las estadísticas oficiales y pasan desapercibidas para las agencias de protección infantil, por lo que es probable que este número sea mucho mayor.
Los conflictos en curso en el Medio Oriente y los disturbios persistentes en Somalia, Sudán del Sur, República Democrática del Congo, República Centroafricana y otros lugares "están dejando a los niños cada vez más expuestos al reclutamiento".
"Los niños y las niñas se usan habitualmente como combatientes y en los puestos de control, como informantes, para saquear aldeas y como esclavos domésticos y sexuales", detalla la ONG.
Los datos del informe también muestran un aumento del 40% en la violencia sexual. Se verificaron 951 casos o incidentes a nivel mundial en el informe de 2018 comparado con 679 en 2013. El último informe revela cómo las niñas de siete años fueron violadas en Myanmar, en Somalia fueron agredidas cuando recogían leña y 13 niñas en Sudán del Sur fueron violadas por bandas armadas.
"Los datos son angustiosos, pero solo representan la punta del iceberg", declaró Child Soldiers International, que explicó que el aumento se debe en parte a una mejora en los métodos de verificación.
En ese línea, señalaron que las cifras no son absolutas debido a las dificultades de la recolección de datos en zonas de conflicto.
La ONG hizo un llamado a que "tomen medidas urgentes para detener estas tendencias impactantes. Desde las comunidades afectadas hasta los gobiernos centrales y la sede de las Naciones Unidas, los recursos deben priorizarse para facilitar la protección y liberación de los niños y, lo que es más importante, brindar un apoyo sostenible para los liberados".
Reinserción
Según estimaciones, de los 55.000 niños liberados desde 2013, solo el 70% ha recibido apoyo, pero a medida que muchos escapan por su cuenta de los grupos armados y las fuerzas de seguridad, es probable que el porcentaje sea menor.
Entre 2015 y 2018, 1.741 niños fueron liberados formalmente en la República Democrática del Congo, según los nuevos datos de Unicef compartidos con Child Soldiers International en enero.
Sin embargo, solo 8.043 niños (2.394 niñas) se han inscrito en programas de apoyo de Unicef desde enero de 2015. Aunque esto ha aumentado en un 22% durante el período, la disparidad en las liberaciones y el apoyo a la reintegración apuntan a los desafíos de brindar asistencia a los niños que regresan.
En ese contexto, la ONG señaló que para revertir estas tendencias "se deben tomar medidas para mejorar la prevención y la asistencia a nivel comunitario".
Asimismo, advirtió que no recurren a las mismas soluciones para todos los casos, sino que tienen en cuenta tanto a las familias como a las comunidades, ya que así son "más efectivo a la hora de evitar futuros reclutamientos, y les dan a los antiguos niños soldados la oportunidad de seguir adelante con sus vidas".
"El reclutamiento de niños es uno de los temas de derechos humanos más desesperados de nuestro tiempo", declaró la directora de Child Soldiers International, Isabelle Guitard, quien advirtió que los datos "solo rascan la superficie de la verdadera escala de la explotación infantil por actores armados en todo el mundo".
Y agregó: "Es fundamental que el mundo no haga la vista gorda a este abuso continuo, y que los recursos locales e internacionales se amplifiquen y combinen para enfrentarlo de manera más efectiva".
Por su parte, Virginia Gamba, representante especial del secretario general de la ONU para Niños y Conflicto Armado, destacó que "la reintegración de ex niños soldados en sus comunidades requiere un compromiso a largo plazo y un amplio apoyo de la comunidad internacional".
Destacó que en colaboración con Unicef, su oficina lanzó la Coalición Mundial para la Reintegración de Ex Niños Soldados, con la que busca "abordar las actuales brechas y necesidades de los programas" en la materia.
"Queremos explorar formas de asegurar que cada niño y niña liberado reciba la mejor asistencia posible donde sea que esté", sostuvo Gamba.