Las hostilidades entre Hezbolá (Líbano) e Israel se han desarrollado en paralelo a la guerra de Gaza durante más de seis meses, alimentando la preocupación sobre el riesgo de un conflicto más amplio.
En este sentido, Israel declaró el domingo que había completado otro paso en la preparación para una posible guerra a lo largo de su frente septentrional.
¿Cuál es el origen de Hezbolá?
La Guardia Revolucionaria iraní fundó Hezbolá en 1982, durante la guerra civil libanesa de 1975-90, como parte del esfuerzo de Irán por exportar su Revolución Islámica de 1979 y luchar contra las fuerzas israelíes que habían invadido Líbano en 1982.
El grupo ha pasado de ser una facción en la sombra a una fuerza fuertemente armada con gran influencia en Líbano y la región. Los Gobiernos occidentales, incluido Estados Unidos, lo consideran un grupo terrorista. También lo hacen los países musulmanes suníes del golfo Pérsico, incluida Arabia Saudí.
¿Cómo se involucró Hezbolá en la guerra?
Hezbolá es una poderosa parte del "Eje de la Resistencia", una alianza de grupos respaldados por Irán en todo Oriente Medio que también incluye al movimiento islamista palestino Hamás, que desencadenó la guerra de Gaza al atacar Israel el 7 de octubre.
Declarando su solidaridad con los palestinos, el grupo comenzó a disparar contra posiciones israelíes en la región fronteriza el 8 de octubre.
Desde entonces, ambos bandos han intercambiado disparos casi a diario: Hezbolá ha lanzado cohetes y aviones no tripulados e Israel ha lanzado ataques aéreos y de artillería. La mayoría de los ataques se han producido cerca o en la frontera, pero ambas partes han ampliado sus ataques en las últimas semanas.
Hasta el 3 de abril, al menos 66 civiles habían muerto en Líbano, según un informe de la ONU. Los ataques desde Líbano han matado a 18 personas —soldados y civiles— en el lado israelí.
Decenas de miles de personas se han visto obligadas a abandonar sus viviendas en Líbano e Israel.
¿Qué poder tiene el ejército de Hezbolá?
Mientras otros grupos se desarmaban tras la guerra civil libanesa, Hezbolá conservó sus armas para luchar contra las fuerzas israelíes que ocupaban el sur del país, de mayoría musulmana chií. Años de guerra de guerrillas llevaron a Israel a retirarse en 2000.
Demostraron avances militares en 2006 durante una guerra de cinco semanas con Israel, que estalló después de que cruzara a Israel, secuestrando a dos soldados y matando a otros. Su poder militar creció a partir de 2006. El grupo afirma que sus cohetes pueden alcanzar todo Israel y que su arsenal incluye misiles de precisión.
Durante la guerra de Gaza, anunciaron ataques con misiles tierra-aire, un arma que desde hace tiempo se creía que tenía en su arsenal pero que nunca antes había confirmado poseer. También ha lanzado drones explosivos contra Israel.
El líder de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrallah, ha afirmado que el grupo cuenta con 100.000 combatientes. Según el World Factbook de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, Hezbolá contaba en 2022 con 45.000 combatientes, repartidos entre unos 20.000 a tiempo completo y 25.000 reservistas.
¿Qué influencia regional tiene Hezbolá?
Hezbolá ha inspirado y apoyado a otros grupos respaldados por Irán en toda la región, incluidas las milicias chiíes iraquíes. Desempeñó un papel importante ayudando a su aliado, el presidente Bashar al Asad, a combatir en Siria, donde sigue teniendo combatientes.
¿Cuál es el papel de Hezbolá en el Líbano?
La influencia de Hezbolá se sustenta tanto en su armamento como en el apoyo de muchos chiíes libaneses que afirman que el grupo defiende Líbano de Israel. Tiene ministros en el Gobierno y legisladores en el parlamento.
Los partidos libaneses opuestos a Hezbolá afirman que el grupo ha socavado el Estado y ha arrastrado unilateralmente a Líbano a las guerras.
Entró en la política libanesa en 1992, presentándose a las elecciones, y empezó a desempeñar un papel más destacado en los asuntos de Estado en 2005, después de que Siria retirara sus fuerzas de Líbano tras el asesinato del ex primer ministro Rafik al-Hariri, un político suní que simbolizaba la influencia saudí en Beirut.
Un tribunal respaldado por la ONU condenó en rebeldía a tres miembros de Hezbolá por el asesinato. Hezbolá niega cualquier implicación y califica al tribunal de instrumento de sus enemigos.
En 2008, una lucha de poder entre Hezbolá y sus enemigos políticos libaneses desembocó en un conflicto armado, después de que el Gobierno prometiera tomar medidas contra la red de comunicaciones militares del grupo. Los combatientes de Hezbolá tomaron partes de Beirut.
Dirigentes libaneses y servicios de inteligencia occidentales han afirmado que grupos vinculados a Hezbolá llevaron a cabo ataques suicidas contra embajadas y objetivos occidentales, y secuestraron a occidentales en la década de 1980.
Estados Unidos responsabiliza al grupo de los ataques suicidas de 1983 que destruyeron el cuartel general de los marines estadounidenses en Beirut, matando a 241 militares, y un cuartel francés, en el que murieron 58 paracaidistas franceses. También afirma que Hezbolá estuvo detrás de un ataque suicida contra la embajada estadounidense en Beirut en 1983.
Refiriéndose a esos ataques y a la toma de rehenes, el líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, declaró en una entrevista de 2022 que fueron llevados a cabo por pequeños grupos no vinculados.
Hezbolá también ha sido acusada de ataques de milicianos en otros lugares. Argentina culpa al grupo y a Irán del ataque mortal contra un centro comunitario judío en Buenos Aires en el que murieron 85 personas en 1994 y de un ataque contra la embajada israelí en Buenos Aires en 1992 en el que murieron 29 personas.
Ambos niegan cualquier responsabilidad.