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A través de una carta de cuatro hojas, el presidente catalán Carles Puigdemont se negó a contestar si declaró la independecia de Cataluña en el pleno del Parlament.
El líder de la Generalitat ofreció este lunes a Mariano Rajoy dos meses de negociaciones expresando que "nuestro principal objetivo es emplazarle a dialogar".
Además, por medio de la misiva, aprovechó de entregar dos propuestas al gobierno español. Una de ellas apela a que se detenga la represión contra la ciudadanía catalana, recordando los episodios de enfrentamiento con la policía durante la celebración del referéndum del pasado 01 de octubre.
Y por otra parte, le exige a Rajoy diálogo sincero y el encuentro para una reunión y así coordinar los primeros acuerdos entre las partes.
Rajoy había emplazado a Puigdemont a responder claramente a su requerimiento, bajo amenaza de iniciar la aplicación del Artículo 155 de la Constitución española, que podría desembocar en la suspensión de todo o parte de la autonomía catalana.
El mandatario independentista tenía hasta este lunes a las 10H00 (08H00 GMT) para decirle al gobierno central si declaró o no la independencia de Cataluña en una sesión celebrada el pasado martes en el Parlamento regional.
Si el gobierno de Rajoy considera que Puigdemont no ha contestado a la pregunta, el líder catalán tendrá todavía hasta el jueves para rectificar.
Puigdemont está bajo una tremenda presión tanto política como económica, diplomática y judicial, atrapado entre quienes le reclaman que declare ya la independencia y quienes le piden frenar.
En su campaña por el referendo, prohibido por la justicia, los independentistas aseguraron que las empresas no se marcharían de Cataluña y que, ante "los hechos consumados", la comunidad internacional los apoyaría.
Sin embargo, 540 empresas se fueron de Cataluña desde el 2 de octubre, y la Unión Europea mostró su apoyo sin fisuras a Rajoy.
