En vida, el narcotraficante colombiano, Pablo Escobar, adquirió cinco hipopótamos para incluirlos en su zoológico privado en Colombia.
Sin embargo, según detalla Clarín, tras su muerte, los animales se reprodujeron y de cinco mamíferos, pasaron a ser cerca de 60, despertando preocupación entre científicos y autoridades locales.
Un estudio prevee que en 30 años, los descendientes de los hipopótamos de Escobar sean miles, esto si no se toman medidas de contención para evitar la reproducción de este animal, cuyo hábitat habitual son las selvas húmedas de África.
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Para 2050, se proyecta que puedan haber entre 400 y 800 hipopótamos en el país cafetero, sin embargo, esto si el índice anual de crecimiento es de 7%, sin embargo, si esta cifra aumentara a un 11%, se podrían llegar a 5 mil ejemplares.
A pesar de ser animales peligrosos, los hipopótamos del fallecido capo colombiano, son vistos con simpatía por los locales, que incluso, los utilizan como recurso turístico, aunque también hay personas a las cuales, su presencia les preocupa.
Producto de lo anterior, se están planificando diversas medidas para controlar la población de estos mamíferos, tales como entregar anticonceptivos a las hembras y esterilizar a los machos.
