AFP
Un "acto terrorista" del ELN dejó dos camioneros muertos en el este de Colombia este jueves, horas después de que el gobierno suspendiera el inicio de diálogos de paz con esa guerrilla hasta que libere a un excongresista en su poder, informó el Ejército.
"Simplemente es un acto terrorista contra dos camiones civiles que viajaban por las carreteras de Arauca, que fueron incinerados y los conductores fueron asesinados por miembros del ELN", dijo a AFP el coronel Miguel Ángel Rodríguez, comandante de la Fuerza de Tarea Quirón del Ejército, que opera en ese departamento fronterizo con Venezuela.
El Ejército de Liberación Nacional (ELN), alzado en armas contra el Estado en 1964 y con 1.500 combatientes según estimaciones oficiales, no se ha pronunciado.
Según el coronel Rodríguez, "miembros" de la Comisión Magdalena Barón del ELN salieron a la vía que conecta los municipios de Saravena y Fortún entre las 17H00 y las 17H30 locales (22H00-22H30 GMT) para "interceptar" a los camiones, cuyo depósito de carga estaba "vacío".
"Pero los conductores hicieron caso omiso y no pararon, por eso les lanzaron un artefacto explosivo, los carros se incineraron y al ver que se estaban incinerando, se bajaron y los asesinaron a sangre fría. Quedaron ahí en el suelo", agregó.
Fuentes militares afirmaron a AFP que tropas de la Brigada 18 del Ejército se trasladaron al lugar, una de las zonas con mayor producción petrolera de Colombia y con presencia histórica del ELN.
El ataque atribuido a esta estructura guerrillera se produce horas después de que el presidente Juan Manuel Santos aplazara la instalación de la mesa de negociaciones con el grupo insurgente, prevista para este jueves en Quito, hasta tanto no sea puesto en libertad el excongresista Odín Sánchez, en poder de los rebeldes desde abril.
El mandatario también suspendió el viaje del equipo negociador a Ecuador, aunque reiteró la disposición de su gobierno para llevar a buen puerto unas conversaciones que buscar poner fin a más de medio siglo de conflicto armado.
El grupo rebelde cuestionó la decisión de Santos. "No compartimos la suspensión de la instalación de la mesa", dijo en su cuenta en Twitter.
Colombia registra más de 260.000 muertos en medio siglo de violencia fratricida, que ha involucrado a guerrillas, paramilitares y agentes de la fuerza pública.