Un tribunal de Mendoza condenó con presidio perpetuo a Claudia Marina Pérez (32), una policía que confesó que asesinó a una de sus colegas al interior de una comisaría.
Los hechos se remontan al 18 de febrero de 2022, cuando en la subcomisaría El Sauce, en la localidad mendocina de Guaymallén, Pérez asesinó a Nidia Angulo (30), intentando pasar el crimen como un suicidio.
De acuerdo a lo reportado por Clarín, a Angulo la encontraron con una herida en la cabeza, la cual correspondía a un disparo.
Tras alertar el hecho a la fiscalía local, se inició una investigación por posible suicidio, pero en el lugar no se encontró su arma reglamentaria ni su teléfono, por lo cual terminó por descartarse esa tesis.
En esa línea, la sospecha cayó sobre el novio de Angulo, quien además es ex pareja de Pérez, por lo que se detuvo a dos personas.
Los aprehendidos fueron la oficial sospechosa y su ex pareja.
Finalmente, el avance de las investigaciones derivaron en que el novio de la fallecida quedara en libertad, pero Pérez figuró como la principal sospechosa, dado que en su teléfono se encontraron amenazas en contra de la víctima y tenía rastros de pólvora en sus manos.
Lo anterior terminó por comprobar que la relación entre ambas era conflictiva, por el vínculo de la mujer asesinada con el ex novio de Pérez, lo que llevó a denuncias cruzadas y a una prohibición de acercamiento.
Con todos los antecedentes sobre la mesa, la justicia mendocina decidió condenar a cadena perpetua a Claudia Marina Pérez, tras confesar el asesinato de su colega.