Esta es una elección entre dos estilos de gobierno: autoritario-populista o conservador-liberal. Los candidatos no podrían ser más diferentes. Keiko Fujimori, de 41 años, ex “primera dama” del país. Por otra parte, Pedro Pablo Kuczynski, exministro de Economía y Finanzas, de 77 años de edad.
Pero a pesar de las personalidades tan diferentes de los rivales políticos, tiene en común dos cosas: Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski ya se enfrentaron en las elecciones presidenciales de 2011. Y ambos proceden de familias inmigrantes.
Joven contra viejo
"Ella se presenta tan bien como su padre, que iba en tractor a los pueblos inaugurando puentes, en persona", admite Kuczynski al diario español El País y reconoce: "Mi edad no es una ventaja".
Pedro Pablo Kuczynski, nació en Lima en 1938 como hijo de un médico alemán, de origen polaco, que emigró de Berlín al Perú durante la dictadura nazi. Pero este candidato “maduro” ha recuperado terreno: los últimos sondeos preelectorales para el 5 de junio pronostican un empate técnico. Según dichos datos, Keiko Fujimori obtendría el 50,3 y Kuczynski el 49,7 por ciento de los votos.
Durante la primera ronda, Fujimori obtuvo el 40 por ciento de los votos, mientras Kuczynski el 21. La decisión sobre la elección está ahora manos en los indecisos, que representan alrededor del 19 por ciento de los 23 millones de votantes en Perú.
¿Mano dura o austeridad?
Ambos candidatos presidenciales luchan con su pasado. Kuczynski, que fue ministro de Finanzas y jefe del Banco Central del Perú, es considerado un economista neoliberal, mientras Keiko Fujimori es temida por sus presuntas intenciones antidemocráticas.
Su padre, el expresidente Alberto Fujimori, quien gobernó de 1990 a 2000, cumple una condena de 25 años por corrupción y violaciones de los derechos humanos, En 1992, con la ayuda de los militares, disolvió el Congreso e impuso un régimen autócrata. Con su controvertido "Programa Nacional de Salud Reproductiva y Planificación Familiar" hizo esterilizar a unas 300.000 mujeres de comunidades pobres e indígenas.
Fin del “Sendero Luminoso”
Especialmente en las remotas regiones rurales el expresidente Fujimori sigue siendo considerado un héroe por su exitoso combate del "Sendero Luminoso". En los 20 años de guerra civil con la guerrilla maoísta (1980-2000) unas 70.000 personas perdieron la vida.
Los seguidores de Keiko Fujimori guardan la esperanza de que vaya a gobernar como su padre "con una mano dura" contra los delincuentes. Sus críticos, sin embargo, temen el regreso de la autocracia, el populismo y el clientelismo.
El diario español El País advierte del retorno del clan Fujimori al poder: "Muchos críticos de Keiko critican su pasado, pero mucho más peligrosas serían las consecuencias de su victoria para el futuro del Perú”.