Este miércoles, el presidente de Perú, Pedro Castillo, anunció un "gobierno de excepción" y disolvió el Congreso de dicho país y horas después fue destituido del cargo.
A través de una declaración, el mandatario peruano indicó que decidía "convocar, en el más breve plazo, a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses. A partir de la fecha y hasta que se instaure el nuevo congreso se gobernará mediante decretos de Ley", según recogió El Comercio.
Junto con ello, dijo que "en atención al reclamo ciudadano a lo largo y ancho del país tomamos la decisión de establecer un gobierno de excepción orientado a establecer el Estado de derecho y democracia, a cuyo efecto se dictan las medidas: disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional".
Eso sumado a decretar un toque de queda a nivel nacional desde este miércoles 7 de diciembre, desde las 22 horas y hasta las 4 horas de la jornada siguiente; y una reorganización del sistema de justicia, afectando al Poder Judicial, el Ministerio Público, la Junta Nacional de Justicia y el Tribunal Constitucional.
Moción de vacancia
Los anuncios hechos por el presidente de Perú se dieron a pocas horas antes que se iniciara el debate de la moción de vacancia en su contra de parte del Congreso.
El Parlamento peruano iniciaría la puja por llegar a los 87 votos para poder destituir al jefe de Estado peruano a raíz de la tercera moción de vacancia que enfrentaba Castillo desde que inició su administración.
En la acusación, apuntaban al mandatario de incurrir en "incapacidad moral permanente" producto de investigaciones abiertas por presuntos actos de corrupción.
En diálogo con T13, el analista internacional Samuel Fernández dijo que "se le juntaron todas las posibilidades malas al presidente Castillo", añadiendo que por pocos votos se estaba discutiendo la incapacidad moral.
"La adjudicatura peruana, desde el momento en que acepta a trámite una de estas incapacidades morales, los tribunales lo acogen, la persona cesa inmediatamente de funciones y va a la cárcel como medida precautoria. No necesita que el juicio termine, no necesita que se dicte la sentencia definitiva. Todo indica que estas cuentas políticas que ha sacado el presidente Castillo lo llevaban muy peligrosamente a esta circunstancia y ha tomado esta decisión", añadió.
Reproches y renuncias de ministros
Tras hacer los anuncios, Pedro Castillo cosechó una serie de reproches de parte de la clase política del país de forma transversal.
Incluso, hay quienes catalogaron el hecho de "golpe de Estado" y varios ministros de su gabinete oficializaron sus renuncias a modo de cuestionamiento.
Pedro Castillo, destituido y detenido
El Congreso peruano adelantó la tramitación y votación de la moción de vacancia, luego que el mandatario anunciara la disolución del organismo.
Lo anterior derivó en que se aprobara la destitución de Pedro Castillo, esto luego que la moción recibiera 101 votos a favor de los 130 posibles.
Tras eso, se le detuvo y fue internado a la Prefectura de Lima.
En otro plano, el secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrad, afirmó que la cumbre de la Alianza del Pacífico que se realizaría en Lima durante diciembre se pospuso.
A dicha cita concurrirían los mandatarios de Chile, Gabriel Boric; México, Andrés Manuel López Obrador; y Colombia, Gustavo Petro.
Por lo pronto, se espera que la vicepresidenta, Dina Boluarte, asuma el cargo de presidenta de Perú.
¿Golpe de Estado?
El analista internacional Samuel Fernández abordó los hechos registrados en Perú que han sido catalogados como golpe de Estado.
Al referirse a la disolución del Congreso, apuntó que "esta es una medida de emergencia y si ustedes ven, los poderes que ha adquirido son gigantescos y al adquirir este tipo de poderes puede ser considerado o un detonante de la situación, porque es de tal envergadura lo que está haciendo que va a tener... no sé y esta es la duda que no podemos adivinar, que es más composición o lo va a salvar de la situación que venía sufriendo".
"Ya no solo es en el Parlamento en que está en sus manos la permanencia de Castillo, sino que va a ser la propia ciudadanía la que va a estar resistiendo esto", complementó.
Al ser consultado sobre si es un golpe de Estado, dijo que "sí. Si lo miramos desde el punto de vista legal, él toma todos los poderes en sus manos, él tiene la autorización si esto se pone en ejecución como corresponde para poder la disolución del Parlamento, de todos los principales órganos jurídicos del Estado (...) y darse un plazo muy largo para que esto se vea y se refleje en una nueva Constitución".