Un inspector de los ferrocarriles griegos fue acusado y detenido provisionalmente este viernes (31.03.2023) por el accidente de tren que provocó 57 muertos hace más de un mes, señaló una fuente judicial.
Dimitris Nikolaou, de 63 años, era el inspector de los jefes de estación que estaba en servicio en la noche de la catástrofe. Fue acusado por una "perturbación de la seguridad del tráfico" que provocó la muerte de numerosas personas y "homicidio por negligencia", dijo esta fuente.
Se trata del segundo empleado de la red ferroviaria griega puesto bajo prisión provisional por este suceso y se arriesga a una pena que va de diez años a la cadena perpetua. La otra persona arrestada es Vassilis Samaras, de 57 años, jefe de estación de la ciudad de Larisa, cerca de donde se produjo la colisión mortal entre un tren de pasajeros y un convoy de mercancías el 28 de febrero.
Otros dos jefes de estación, en servicio esa noche, fueron procesados por haber dejado su puesto antes del fin de su turno y dejar solo a su compañero menos experimentado, pero los dos quedaron en libertad a principios de semana tras el pago de una fianza de 10.000 euros. Deben presentarse ante la policía dos veces al mes.
El accidente de tren, el peor en la historia de Grecia, también puso en evidencia las carencias crónicas en la red ferroviaria del país y el retraso en la modernización de los sistemas de seguridad. (AFP)