La Policía investiga un presunto segundo grupo que estaría planeando un atentado terrorista durante los Juegos de Río, sostiene O Globo. Al mismo tiempo, la Policía arrestó al último prófugo del primer frente sospechoso.
Se trata de un nuevo frente de investigación de la operación Hashtag, en el marco de la cual fueron ya arrestados 12 brasileños que juraron fidelidad a la milicia terrorista Estado Islámico (EI) y estarían preparando un ataque durante la cita deportiva que comienza en 11 días.
Por otra parte, la Policía Federal brasileña arrestó al último sospechoso del primer grupo que estaba planeando un atentado terrorista durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro que estaba prófugo, informaron hoy medios locales.
Según el informativo de la TV Globo, el sospechoso, de 32 años, fue detenido en la ciudad de Comodoro, en el estado de Mato Grosso. Se trata del último de los 12 brasileños sospechosos de crear una célula terrorista "amateur" que estaría planeando perpetrar un atentado durante la cita deportiva, que comienza el 5 de agosto.
Los otros miembros del grupo virtual denominado Defensores de la Sharia fueron arrestados la semana pasada. Diez de ellos el jueves 21 y el undécimo se entregó un día después. La captura fue posible con ayuda del FBI, que alertó a las autoridades brasileñas sobre los intercambios que el grupo realizaba a través de las aplicaciones móviles WhatsApp y Telgram.
Juraron fidelidad a la milicia terrorista Estado Islámico
En los diálogos interceptados, se constató que juraron fidelidad a la milicia terrorista Estado Islámico (EI), aunque no llegaron a tener contacto directo con el grupo, y festejaron en redes sociales los atentados ocurridos en Orlando y Niza. También se descubrió que intentaron comprar un fusil AK-47 en una tienda clandestina de Paraguay. Todos están recluidos en un penal de máxima seguridad donde permanecerán en régimen de prisión temporal por 30 días, prorrogables por igual periodo.
Según el diario "O Globo", el sospechoso tiene antecedentes penales, estuvo preso por homicidio calificado y fue integrante de una banda que realizaba asaltos en el estado de Tocantins, en el norte del país. Huyó de la cárcel tras ser autorizado a salir en forma temporaria.
La preocupación por eventuales ataques terroristas durante los primeros Juegos Olímpicos que se realizan en un país sudamericano cobró fuerza en las últimas semanas a raíz de los atentados ocurridos en varios países y también tras el arresto del grupo de brasileños. Esto llevó a que las autoridades revisaran el operativo de seguridad que será implementado durante la cita deportiva, que atraerá a Río de Janeiro a unos 700.000 extranjeros, entre turistas, atletas y delegaciones, y a cerca de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno.
