En declaraciones a la cadena CNN, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, afirmó estar dispuesto a reanudar el diálogo para buscar una salida a la crisis sociopolítica que enfrenta el país centroamericano desde el 18 de abril.
Para lograr esto el mandatario apuntó a la mediación de la ONU y a la participación de la Iglesia para buscar una salida a las protestas contra su Gobierno.
"Hemos tomado contacto con el secretario general de Naciones Unidas, con diferentes organismos internacionales y lógicamente con el cardenal Brenes. Estamos esperando el momento", dijo Ortega.
Precisamente, la ONU expresó que está discutiendo la posibilidad de asumir algún tipo de papel en los esfuerzos para mediar y poner fin a la crisis nicaraguense.
En esta entrevista, Ortega se mostró más flexible sobre la propuesta de convocar a elecciones anticipadas, uno de los principales pedidos en el diálogo nacional y que ha sido rechazada por Ortega. Lo que se contradice con las anteriores entrevistas que ha dado el mandatario en los últimos días, donde ha rechazado abiertamente esta opción.
"Le podríamos preguntar a la gente, claro que sí. Si la gente dice que sí, vamos a elecciones anticipadas. Y si la gente dice que no, van a decir que hicimos fraude. Porque todavía las reformas que hay que hacer, los mecanismos, todo el trabajo que para fortalecer el sistema electoral necesita también de recursos", dijo el presidente.
Sobre el número de muertos reiteró que los datos de organismos de derechos humanos "no han sido depurados, no han sido verificados, simplemente son denuncias que ellos han recibido y van sumando, van sumando, van sumando", y señaló que las cifras oficiales, "que no son poca cosa tampoco, son 195 fallecidos".
Por su parte, la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos cifra los muertos en 448 muertos y 595 desaparecidos, mientras que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha confirmado la muerte de 295 personas.