En un comunicado el Presidente Barack Obama envío este jueves una orden ejecutiva donde solicita coordinación entre los diferentes agentes de su Gobierno estadounidense para preparar al país de eventos meteorológicos del espacio, relacionados a una gran tormenta solar, que podrían provocar “efectos mensurables en los sistemas críticos de infraestructura y tecnologías, tales como el Sistema de Posicionamiento Global (GPS), las operaciones de satélites y la comunicación, la aviación, y la red de energía eléctrica”, indica en el oficio.
El equipo del Presidente indica también que estos fenómenos pueden presentarse en forma de “destellos solares, partículas de energía solar y ruidos geomagnéticos”. De acuerdo al decreto, este tipo de eventos ocurren regularmente, pero pueden afectar sistemas de infraestructura clave y estratégica como el anteriormente señalado, además de tener el potencial de “afectar e interrumpir simultáneamente la salud y la seguridad en continentes enteros”, según lo que advierten en La Casa Blanca.
A través de todo el documento se advierten las órdenes que da el mandatarios para establecer una coordinación entre cada uno de los departamentos de estado y no dice que alguno de estos eventos pueda ocurrir en el corto plazo. De acuerdo al escrito, esta orden responde a que "una preparación exitosa ante eventos meteorológicos del espacio es un esfuerzo de toda la nación que requiere colaboración entre gobiernos, gestores de emergencia, el mundo de la academia, medios de comunicación, la industria farmacéutica, organizaciones sin ánimo de lucro y el sector privado”.
Los ruidos geomagnéticos son una afectación del campo magnético de la tierra como consecuencia de la actividad solar. Los destellos solares son una breve erupción de intensidad en la superficie del sol o cerca de ella, que se asocian con manchas solares. Es un fenómeno común que raramente tiene efectos relevantes. Las partículas de energía solar son iones y electrones expulsados desde el sol como resultado de esas erupciones.
Los eventos meteorológicos del espacio
En 1859, una tormenta solar conocida como evento Carrington dejó sin telégrafo a todo el mundo y las auroras se podían ver desde los polos hasta el caribe.
El año 1989, una serie de erupciones solares dejó inservible un transformador en Nueva Jersey, dejando a 6 millones de personas afectadas en Canadá.
La orden ejecutiva de Obama busca que, en un tiempo establecido, el Gobierno se pueda organizar para prevenir, anticipar e investigar éstos fenómenos climáticos extra terráqueos. Por otro lado, le da 120 días a la Secretaría de energía para que desarrolle un plan que proteja a la red de energía eléctrica de las perturbaciones electromagnéticas generadas por este tipo de eventos.
Pero estos efectos no solo traen problemas a la tierra, sino que también son hermosos.
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[VIDEO] La NASA capta una danza magnética en el Sol
