"Con este acto terrorista buscaba varias cosas, entre ellas notoriedad, por eso nunca me escucharán decir su nombre", aseguró Jacinda Ardern ante los diputados, reunidos en Wellington, la capital.
La primera ministra de Nueva Zelanda envió además este martes un mensaje de paz a los musulmanes, en un discurso que abrió con el saludo en árabe "salam aleikum". Ante una sesión especial del Parlamento, Ardern declaró que sobre el supremacista blanco responsable de la matanza en Christchurch, caerá todo el peso de la ley.
El extremista Brenton Tarrant, de 28 años, autor del atentado que costó la vida a 50 personas dos mezquitas, permanece en prisión provisional hasta que comparezca ante el juez, el próximo 5 de abril.
De momento, está acusado de asesinato, pero la primera ministra aseguró que la justicia no se quedará ahí. Ardern insistió también en que se abrirá una investigación para determinar cómo pudo el australiano planificar y llevar a cabo sus ataques en Nueva Zelanda sin que los servicios de seguridad se percataran.
Tarrant grabó durante 17 minutos las imágenes y publicó un largo manifiesto de más de 70 páginas justificando su ideología de extrema derecha y su odio a los musulmanes, que junto al vídeo fueron publicados en las redes sociales.
Youtube anunció hoy que ha retirado "decenas de miles" de vídeos de su plataforma que mostraban el atentado terrorista, que fue retransmitido en directo a través de la red social. La plataforma dijo que, tanto por su alcance como por su velocidad, el vídeo se propagó entre los usuarios a una velocidad sin precedentes.
El anuncio de Youtube llega después de que varias empresas neozelandesas hubieran retirado sus anuncios de las redes sociales en protesta por la difusión del atentado. La Asociación de Publicistas de Nueva Zelanda y el Consejo de Comunicaciones Comerciales han publicado este lunes un comunicado en el que instan a sus miembros a considerar dónde invertir su dinero en cuestión de publicidad.
"Los eventos de Christchurch plantean la cuestión de que si los dueños de este tipo de páginas pueden llegar a los consumidores con publicidad en microsegundos por qué no pueden utilizar la misma tecnología para prevenir que este tipo de contenidos sean difundidos en vivo", recoge el texto.
"Desafiamos a Facebook y otras plataformas para que tomen medidas inmediatas para moderar de manera efectiva el contenido de odio antes de otra tragedia pueda ser difundida online", continúa.