A través de redes sociales se viralizó la historia de Althia Bryden, una mujer de 58 años que sufrió un derrame cerebral, lo que le dejó secuelas en su día a día, como un raro acento italiano, debido a un extraño trastorno conocido como el síndrome del acento extranjero.
El derrame cerebral de la mujer ocurrió el pasado 4 de mayo, cuando fue encontrada inconsciente en su cama al interior de su casa en Highbury, Inglaterra, según detallan en el medio internacional The Mirror.
Los especialistas que atendieron a la mujer señalaron que el evento se produjo por una membrana carotídea, una estructura en el cuello que puede interrumpir el flujo sanguíneo al cerebro.
Según su propio relato, en un inicio, la mujer había quedado sin habla, por lo que fue operada, lo que derivó en un inesperado acento italiano.
"Pasé tres meses después de mi derrame cerebral pensando que nunca podría volver a hablar", detalló la mujer en conversación con The Mirror, apuntando a una sensación de soledad.
Al día siguiente de la operación, aún en cuidados intensivos, Althia Bryden sorprendió a los especialistas al retomar el habla.
"La enfermera se apresuró a llamar a sus colegas a mi cama. Nadie podía creer que estuviera hablando después de tanto tiempo", recordó.
INESPERADO ACENTO ITALIANO
La sorpresa para la mujer no terminó ahí, ya que despertó hablando con un marcado acento italiano. De hecho, según su propio relato, incorporó palabras tradicionales de esa lengua de manera espontánea, como "mamma mia", "bambino", entre otras.
Los especialistas le explicaron que el fenómeno se vincula con el síndrome del acento extranjero, una condición rara que aparece en escasas ocasiones tras daños cerebrales.
"Siento que una gran parte de mí se ha ido, mi personalidad, mi identidad, mis raíces", lamentó, señalando que hasta su risa se vio afectada: "No soy yo. Me siento como un payaso con una sonrisa al revés al que la gente ve actuar".
Por ahora, la mujer y los especialistas no tienen claro cuándo se acabará su acento italiano y retomará su habla de antes del daño cerebral.
A pesar de lo anterior, mantiene una actitud positiva: "Estoy muy agradecida de estar viva después de mi derrame cerebral y también estoy muy agradecida de estar poder comunicarme después de vivir sin hablar durante tres meses", cerró en conversación con el medio citado.