La joven viuda de un anciano magnate inmobiliario japonés fue detenida este miércoles, sospechosa de haber asesinado al autoproclamado "Don Juan", pocos meses después de su boda, informaron medios nipones citando a la Policía Kosuke Nozaki, quien en su autobiografía se jactaba de haber gastado millones de dólares en jóvenes y hermosas mujeres, murió en 2018 a los 77 años a causa de un envenenamiento agudo.

Su viuda Saki Sudo, actualmente de 25 años, supuestamente asesinó a Nozaki al obligarlo a ingerir una gran cantidad de un estimulante no precisado.

Algunos informes menciona que lo había mezclado con alguna bebida, puesto que no se encontraron marcas de agujas en su cuerpo. Contactada por la AFP, la Policía local se negó a confirmar la detención de la joven.

Nozaki, que dirigía negocios inmobiliarios, una empresa de venta de licores y otra de préstamos, afirmaba en su autobiografía, muy vendida, que había gastado tres mil millones de yenes (27,5 millones de dólaress) en cortejar a unas 4.000 mujeres.

"La razón por la que gano dinero es por salir con mujeres atractivas", rezaba un pasaje de su libro, publicado en 2016, cuyo título es "Don Juan de Kishu", refiriéndose a la región de Japón en la que vivía.

"No me interesan los autos ni tampoco las casas. En cambio, tengo un deseo sin límites de mantener relaciones sexuales con bellas mujeres", confesaba en el libro, que además incluía capítulos sobre cómo seducir a estudiantes universitarias y azafatas en aviones.

Nozaki hizo su fortuna a partir de la nada, vendiendo de todo, desde viejos trozos de metal hasta preservativos y licores, de acuerdo al sitio web del editor de su libro.

Supuestamente, Sudo buscó información online sobre drogas antes de la muerte de su marido, de acuerdo a la prensa. En una columna que Nozaki escribió para la web Gendai Business, en 2018, pocos meses antes de su muerte, dijo estar "seguro de ser feliz" al haberse casado con Sudo, a pesar de que le habían advertido que probablemente ella estaba con él por su dinero.

Indicó que se conocieron en el aeropuerto Haneda, en Tokio, donde tropezó adrede para que Sudo, quien dijo ser modelo, lo ayudara.

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