En Irak, la Comandancia de Operaciones Conjuntas anunció este domingo (27.11.2016) que sus fuerzas habían logrado liberar un total de veintiún barrios en el este de Mosul desde el pasado 17 de octubre, cuando tropas locales y kurdas comenzaron la mayor ofensiva terrestre contra Estado Islámico desde 2003. El objetivo de la misma: arrebatarle a los extremistas la provincia de Nínive y su capital, Mosul, el mayor bastión de EI desde 2014.

El subcomandante de las Operaciones Conjuntas, Abdelamir Yaralá, agregó que, este 27 de noviembre, las fuerzas antiterroristas lograron limpiar de explosivos los barrios de Al Bekr, Al Zohur y Al Qahira, e irrumpir en los distritos de Al Jaa 2 y Al Nahda, también en Mosul Oriental. En lo que respecta al oeste de esa ciudad, las controvertidas milicias chiíes de Movilización Popular se hicieron este domingo (27.11.2016) con las localidades de Al Maliha y Tel Fares.

La meta de los combatientes chiíes es liberar la comarca de Tel Afar, situada unos 60 kilómetros al oeste de Mosul. Movilización Popular dice haber liberado trece pueblos iraquíes desde el viernes pasado (25.11.2016) tras matar a al menos 32 yihadistas de EI en diversos enfrentamientos. A pesar de estas victorias, continúa la disputa entre los dirigentes políticos de diversas facciones sobre el estatus de las unidades paramilitares de Movilización Popular.

Este sábado (26.11.2016) en Bagdad, diputados chiíes consiguieron que el Parlamento iraquí aprobara la legalización de Movilización Popular, a pesar de que sus integrantes son apoyados por Irán. Numerosos miembros de la comunidad suní de Irak acusan a los paramilitares chiíes de haber incurrido en abusos serios cuando liberaron vecindarios suníes del yugo de EI. Movilización Popular refuta esas imputaciones. Esas fricciones ralentizan el progreso de la campaña contra EI en Irak.

Publicidad