La empresa estadounidense de biotecnología, Moderna, anunció este lunes que su vacuna contra el COVID-19 tiene casi un 95% de efectividad según los resultados obtenidos tras las fases clínicas.
Desde Moderna también aseguraron que planean solicitar la aprobación para usar su vacuna dentro de los próximos días.
El estudio, conocido como COVE, reclutó a más de 30.000 participantes en Estados Unidos y la mitad de los voluntarios recibió dos dosis de la vacuna con cuatro semanas de diferencia. El resto recibió inyecciones con placebos.
Estos resultados llegan inmediatamente después de los publicados por Pfizer, quienes informaron que su vacuna posee más de un 90% de eficacia. Además, Rusia confirmó que Sputnik V obtuvo un 92% de eficacia durante los estudios clínicos realizados con voluntarios en la fase 3.
Estos estudios aumentan la confianza en que las vacunas pueden ayudar a poner fin a la pandemia, sobre todo porque Moderna podría producir hasta 20 millones de vacunas para fines de este año, aunque todas se usarían en Estados Unidos, indicó la compañía, según Reuters.
“Si la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) permite el uso de emergencia de las vacunas de Moderna o de Pfizer, habrá suministros racionados limitados antes de fin de año”, indicaron.
Ambas vacunas requieren que las personas reciban dos inyecciones, con varias semanas de diferencia. Los funcionarios estadounidenses dijeron que esperan tener alrededor de 20 millones de dosis de Moderna y otros 20 millones de dosis de la vacuna fabricada por Pfizer y su socio alemán BioNTech, para usar a fines de diciembre.
Aún no se ha decidido exactamente quién será el primero en la fila, sin embargo, el secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, dijo que la esperanza es que haya suficientes dosis disponibles para fines de enero para vacunar a los adultos mayores de 65 años, que corren el mayor riesgo de contraer el coronavirus, y a los trabajadores de la salud.
El doctor Anthony Fauci, principal experto en enfermedades infecciosas del gobierno de Estados Unidos, dijo que podría pasar hasta la primavera o el verano (entre marzo y junio de 2020) para que cualquier persona que no esté en alto riesgo y quiera una inyección pueda aplicársela.