Millones de personas en los trópicos podrían estar expuestas a un calor peligroso durante la mitad del año en 2100, incluso si la humanidad consigue cumplir losobjetivos climáticos, advirtieron los investigadores este jueves (25.08.2022).
En el escenario más probable, el mundo no alcanzaría esos objetivos, lo que podría someter a la población de los trópicos a temperaturas perjudiciales la mayor parte de los días de cada año típico a finales de siglo, según el estudio.
Si las emisiones no se controlan, un gran número de personas en estas regiones podrían enfrentarse a períodos de calor extremo potencialmente "de pesadilla".
"Existe la posibilidad de que, si no nos ponemos las pilas, miles de millones de personas se vean realmente sobreexpuestas a estas temperaturas extremadamente peligrosas de una forma que no hemos visto hasta ahora", afirmó el autor principal, Lucas Vargas Zeppetello, de la Universidad de Harvard.
Graves olas de calor amenazan la salud humana
Las graves olas de calor –que el cambio climático ha hecho más frecuentes y calurosas– ya se dejan sentir en todo el mundo, amenazando la salud humana, la vida silvestre y el rendimiento de las cosechas.
La mayoría de las proyecciones climáticas prevén aumentos de temperatura en diferentes escenarios políticos, pero no dicen cuál de esas vías es más probable.
En este estudio, publicado en la revista Communications Earth and Environment, los investigadores calcularon la exposición potencial al calor y la humedad peligrosos.
Utilizaron proyecciones estadísticas para predecir los niveles de emisiones de dióxido de carbono procedentes de la actividad humana y los niveles resultantes de calentamiento global.
Descubrieron que muchas personas de las regiones tropicales podrían enfrentarse a niveles de calor peligrosos durante la mitad del año a finales de siglo, incluso si el mundo limita el aumento de la temperatura al objetivo del acuerdo climático de París de menos de dos grados Celsius (35,6 grados Fahrenheit) por encima de los niveles preindustriales.
Fuera de los trópicos, los investigadores afirman que es probable que las olas de calor mortales se conviertan en sucesos anuales.
Niveles "peligrosos" y "extremadamente peligrosas"
Los investigadores utilizaron un índice de calor que sitúa los niveles "peligrosos" en 39,4C, mientras que las temperaturas superiores a 51C se consideran "extremadamente peligrosas" y totalmente inseguras para los seres humanos.
Esta medida extrema se desarrolló originalmente para personas que trabajaban en ambientes interiores abrasadores, como la sala de calderas de un barco, y rara vez se han observado en el exterior, dijo Zeppetello.
Pero para finales de siglo, el investigador dijo que estaba "prácticamente garantizado" que la gente de algunas partes de los trópicos experimentaría este nivel de calor cada año a menos que las emisiones se reduzcan severamente, con franjas del África subsahariana y la India particularmente en riesgo.
"Eso es bastante aterrador", dijo a la AFP, añadiendo que incluso caminar al aire libre sería peligroso en esas condiciones.
El mundo superara con creces el objetivo de 2 °C
La Tierra se ha calentado casi 1,2ºC hasta ahora y las predicciones actuales, basadas en las promesas de los países de reducir las emisiones de carbono, harían que el mundo superara con creces el objetivo de 2 °C del Acuerdo de París para 2100, por no hablar de su aspiración más ambiciosa de 1,5 °C.
En su investigación, Zeppetello y sus colegas analizaron las predicciones de los modelos climáticos globales, las proyecciones de la población humana y examinaron la relación entre el crecimiento económico y las emisiones de carbono.
Calcularon que solo hay un 0,1 % de posibilidades de limitar el calentamiento medio global a 1,5 °C en 2100, y proyectaron que es probable que el mundo alcance 1,8 °C en 2050.
Según los investigadores, el aumento más probable de la temperatura media mundial en 2100 sería de 3 °C, lo que, según Zeppetello, supondría unas condiciones "de pesadilla" para muchas personas.
Dos meses de temperaturas extremas
En el peor de los casos, en el que las emisiones continuaran sin control, dijo que las temperaturas extremas podrían durar hasta dos meses cada año en algunas partes de los trópicos.
Pero dijo que depende de la rapidez con que la humanidad pueda reducir las emisiones.
"No tenemos que ir a ese mundo. Ahora mismo no hay nada que diga que es una certeza, pero la gente tiene que ser consciente de lo peligroso que sería si se produjera", dijo.
Los investigadores afirmaron que en todos los escenarios podría haber un gran aumento de las enfermedades relacionadas con el calor, sobre todo entre las personas mayores, las vulnerables y las que trabajan al aire libre.