Las inundaciones obligaron este miércoles a miles de habitantes de la Isla Sur de Nueva Zelanda a abandonar sus hogares, mientras que cientos de turistas quedaron bloqueados en un parque natural.
La región de Southland -que cubre la parte más meridional de la Isla Sur- declaró el estado de emergencia después de la caída de más de 1.000 milímetros de lluvia en 60 horas. Las lluvias torrenciales causaron deslaves en carreteras y los ríos se salieron de sus lechos.
Las autoridades pidieron este miércoles a los habitantes de las zonas de Gore y Mataura, situadas a baja altitud, que evacuaran inmediatamente, cuando el río Mataura se desbordó.
Como medida de precaución, se interrumpió el servicio eléctrico en las zonas afectadas y se instalaron centros para evacuados en iglesias y colegios de la región. Las autoridades han anunciado que casi 200 personas fueron evacuadas por vía aérea de Milford Sound hacia la ciudad aledaña de Te Anau.
"Nos hemos ocupado bien de los turistas", afirmó un portavoz de los servicios de emergencia. Tienen "la moral alta", "reciben información regularmente y están en contacto con amigos y familiares".