Por AFP-T13.cl

El Clan del Golfo, la banda armada narcotraficante más poderosa en Colombia, está dispuesta a rendirse y someterse a las autoridades, anunció el presidente Juan Manuel Santos (en la foto) este martes.

El domingo "recibimos del jefe del Clan del Golfo una manifestación expresa de la voluntad (...) de someterse a la justicia él con todos sus hombres", dijo el mandatario en un discurso en la sede de gobierno.

Santos agregó que el ministro de Justicia, Enrique Gil, y el fiscal general, Néstor Martínez, evaluarán el ofrecimiento de la organización armada y "tomar las acciones pertinentes". "Se trataría de un sometimiento a la justicia, no de una negociación política", enfatizó Santos.

El Clan del Golfo se conformó con los remanentes de los grupos paramilitares que combatieron a muerte a las guerrillas izquierdistas en el prolongado conflicto colombiano.

La mayoría de esas milicias se desmovilizaron en 2006, pero varios de jefes y sus hombres se organizaron en nuevas bandas dedicadas al tráfico de drogas y la minería ilegal. 

La organización llegó a tener 4.000 miembros, pero tras la fuerte ofensiva que lanzó el gobierno de Santos, el Clan del Golfo cuenta ahora con unos 1.800 hombres, según el ministerio de Defensa.

El 31 de agosto, la banda criminal Clan del Golfo perdió a su número dos, Roberto Vargas Gutiérrez, alias el “Gavilá n” que fue “abatido por la Fuerza Pública", como escribió el  Presidente Juan Manuel Santos en su Twitter.

Santos calificó la operación al campamento de Vargas como “el más duro golpe en los últimos dos años” contra esa banda criminal.

Desde junio, las autoridades están tras la caza de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, jefe máximo del Clan del Golfo por quien Estados Unidos ofrece una recompensa de cinco millones de dólares.

Este anuncio se da en un momento histórico en Colombia, cuando las FARC, ahora Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, se convirtió en partido político y el gobierno firmó un acuerdo de cese al fuego con el Ejército de Liberación Nacional, la última guerrilla del país. Además, este miércoles llega el Papa Francisco a Bogotá con su mensaje de paz y esperanza

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