Tras una angustiosa noche en total oscuridad, Alex Goodman descubrió el sábado la devastación causada por un potente tornado en su pueblo de Mayfield, Kentucky: "Es como si hubiera estallado una bomba en nuestro barrio".

El día amaneció con bloques de casas arrasados, edificios derrumbados, árboles arrancados, grandes edificios con los tejados desgarrados, vehículos apilados y reducidos a escombros. 

Hay decenas de muertes confirmadas, pero se teme que haya muchas más. El gobernador de Kentucky ha llegado a decir que prevé que el número de muertos solo en este estado supere los 100. 

Goodman sobrevivió al paso de uno de los tornados. "Estábamos en el sótano", dijo a la AFP. 

"Patrimonio borrado"

"La electricidad parpadeó y luego se cortó. De hecho, podías sentir que la casa vibraba. La fuerza del viento y la lluvia era increíble. Daba miedo", dijo Goodman, de 31 años, que recientemente fue madre. 

Una vez que pasó el tornado, su marido y su padre tuvieron que cortar los árboles derribados por el viento para llegar a su coche. 

Sin las luces de Navidad para guiarse, sin alumbrado público y con el servicio telefónico afectado, tuvieron que esforzarse por saber cómo estaban amigos, vecinos y familiares: "Somos una comunidad pequeña y unida", asegura Goodman. 

Entonces la luz del día reveló la magnitud del desastre. "Vivimos en un municipio histórico y todo nuestro patrimonio histórico ha sido borrado. Tenemos cuatro iglesias antiguas, nuestro juzgado, nuestro banco... todo está destruido", explica. 

Excavaciones nocturnas en los escombros

Uno de los edificios más afectados es una fábrica de velas, donde unos 100 empleados trabajaban en turnos de noche para satisfacer la demanda de las vacaciones de Navidad. El edificio se derrumbó parcialmente. 

Ivy Williams acudió a la fábrica en plena noche buscando a su esposa Janine, empleada de la empresa de velas. 

"Recibí una llamada de mi mujer a las 10 de la noche y me dijo que la tormenta era muy fuerte, le dije 'OK' y ahí colgamos. Entonces, a las 22H30, mi hija me llamó para decirme que el techo se había caído", dijo a CNN. 

"Me apresuré y cuando llegué allí (...) ya no era un edificio", continuó. 

"Entonces participé en las operaciones (de rescate) como pude, logré agarrar a dos personas, una mujer y un hombre. Y seguí diciendo el nombre de mi esposa, Janine Williams, sin obtener respuesta. Y el sábado vi a un hombre con el que trabajaba, que me dijo que estaba en la lista de personas que fueron retiradas. Pero no sé dónde la llevaron".

La serie de tornados que golpeó entre el viernes y el sábado el centro y el sur de Estados Unidos también arrasó otras zonas de Kentucky, así como de los estados de Illinois, Arkansas, Tennessee y Misuri. 

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