AFP
Más de dos millones de fieles iniciaron este domingo, bajo un calor sofocante, la gran peregrinación a La Meca, el lugar más sagrado del islam en Arabia Saudita.
La concentración de multitudes representa un desafío logístico para las autoridades.
El hach es uno de los cinco pilares del islam de obligado cumplimiento para todos los musulmanes al menos una vez en la vida siempre que dispongan de medios para hacerlo.
"Venir aquí es el sueño de todo musulmán", es "el último viaje", declaró a la AFP Soliman Ben Mohri, un comerciante de 53 años que reside en Francia.
Los peregrinos llegan a La Meca, en el oeste del reino, desde todo el mundo, especialmente de Egipto, India, Pakistán, Bangladés y Sudán, precisan las autoridades.
La peregrinación termina con el Eid al Adha, una fiesta de tres días seguida del ritual de la "lapidación de Satanás".
Con el paso de los años, el hach fue adquiriendo un cariz cada vez más tecnológico, con múltiples aplicaciones móviles para ayudar a los fieles a comprender las instrucciones, orientarse u obtener atención urgente en la Media Luna Roja saudí.
La peregrinación de 2015 se enlutó por una gigantesca estampida en la que murieron unas 2.300 personas, entre ellas cientos de iraníes.
La de 2018 se desarrolla en un momento en el que Arabia Saudita, un país ultraconservador, se encuentra en plena transformación con una batería de reformas que, por ejemplo, han permitido conducir a las mujeres, pero al mismo tiempo las autoridades acallan duramente las voces disidentes. 0.