Un total de 561 soldados de la Guardia Nacional de Ucrania han muerto desde el inicio de la guerra con Rusia, indicó el miércoles el jefe de ese cuerpo que incluye al batallón Azov, actualmente atrincherado en una acería de Mariúpol (sureste).
Otros 1.697 soldados de la Guardia Nacional resultaron heridos desde que empezó la invasión rusa, el 24 de febrero, precisó el comandante de la Guardia Nacional, Oleksiy Nadtochy, en un comunicado.
Tanto Rusia como Ucrania suelen ser parcos en la divulgación de sus bajas.
A mediados de abril, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, indicó que entre 2.500 y 3.000 soldados ucranianos habían perdido la vida y que otros 10.000 habían resultado heridos y admitió que era "difícil decir cuántos de estos podrían sobrevivir".
La Guardia Nacional Ucraniana, que depende del ministerio del Interior, fue creada en marzo de 2014 después de que Rusia se hiciera con el control de la península de Crimea, en el mar Negro, y concentrara tropas junto a las fronteras orientales de Ucrania.
Por ley, puede contar con hasta 60.000 efectivos y ha absorbido varios grupos de autodefensa que estaban en primera línea en la revolución del Maidán, en 2014, así como varios regimientos nacionalistas como el de Azov.
Las autoridades ucranianas indicaron el martes que más de 1.000 miembros del batallón Azov siguen atrincherados en la planta siderúrgica Azovstal y que entre ellos hay centenares de heridos.