AFP
Malasia obligó a dar media vuelta a dos barcos con más de 600 migrantes a bordo que intentaban llegar a sus costas, indicó este jueves un responsable que no quiso identificarse.
Los barcos fueron interceptados frente a las costas de las islas malasias de Penang y Langkawi y les comunicaron que no podían tomar tierra.
"Esta noche un barco fue obligado a dar media vuelta después de haber entrado en las aguas de Malasia frente a Penang y se impidió a otro entrar en las aguas de Langkawi," dijo el funcionario.
Las autoridades dieron agua embotellada al barco en Penang antes de obligarle a dar marcha atrás.
Malasia e Indonesia anunciaron su intención de rechazar a los barcos de inmigrantes procedentes de Birmania y Bangladesh que en los últimos días han intentado llegar a sus costas y de los que 2.000 fueron rescatados.
En su mayoría se trata de rohingyas, una minoría musulmana perseguida.
La ONU criticó la decisión de Malasia e Indonesia y aseguró que podría haber miles de hombres, mujeres y niños a la deriva.