La activista pakistaní y Premio Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, se mostró preocupada por la llegada de los talibanes a Afganistán, lugar donde el presidente ya abandonó el país y miles de afganos intentan escapar a otras naciones.
En su cuenta de Twitter, Malala precisó que su intranquilidad se centra principalmente en el destino de las mujeres afganas bajo un régimen fundamentalista islámico: "Observamos completamente conmocionados cómo los talibanes toman el control de Afganistán. Estoy profundamente preocupado por las mujeres, las minorías y los defensores de los derechos humanos", explicó.
Adicionalmente, la también estudiante universitario hizo un llamada a la comunidad internacional ante esta situación: "Los poderes globales, regionales y locales deben pedir un alto el fuego inmediato, proporcionar ayuda humanitaria urgente y proteger a los refugiados y civiles", solicitó.
Malala fue víctima en 2012, cuando tenía 15 años, de un atentado por parte del Movimiento de los Talibanes Pakistaníes, quienes les dispararon cuando subía a un autobús escolar provocándole graves heridas en el rostro y cuello. La activista continuó su recuperación en Inglaterra, país a donde se trasladó a vivir definitivamente.
En 2014 recibió con 17 años el Premio Nobel de la Paz, siendo la persona más joven en obtenerlo en la historia.