El Gobierno de la ciudad de Madrid y el WorldPride 2017, la fiesta mundial del orgullo gay que tiene este año como sede la capital española, lanzaron el programa de voluntariado para que los vecinos se impliquen en la celebración.

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, presentó durante el acto el símbolo de esa implicación: un proyecto para que los madrileños confeccionen una enorme bandera arcoiris (la representativa del colectivo gay) con más de 100.000 lazos de colores.

Los ciudadanos podrán atar las cintas en una malla para elaborar la bandera, de 12 por seis metros, que colgará del Palacio de Cibeles, sede del Ayuntamiento de Madrid, "como reflejo de la implicación y participación ciudadana en la celebración del World Pride de Madrid".

El programa de voluntariado busca difundir las actividades de las fiestas que tendrán lugar del 23 de junio al 2 de julio y garantizar la organización de un evento complejo que reunirá a miles de personas en un ambiente festivo en las calles.

Los cientos de voluntarios se encargarán de facilitar la acogida y orientación de los visitantes internacionales, reciclar residuos, proteger espacios de valor medioambiental y colaborar en la organización de los diversos eventos durante las fiestas.

"Queremos demostrar al mundo entero que Madrid es la ciudad idónea para la celebración del WorldPride", señaló la organización, que confió en que madrileños y turistas "se encuentren como en casa" y respiren "el clima de tolerancia, de participación y de respeto que se disfruta en la ciudad".

Publicidad