El vicepresidente de Estados Unidos, el demócrata Joe Biden, ha pedido al presidente electo, el republicano Donald Trump, que "madure" y le ha reprendido por haber criticado a los servicios de inteligencia del país.

Las críticas tienen que ver con el posible papel de hackers rusos durante las elecciones que el magnate ganó el 8 de noviembre.

La Oficina Central de Inteligencia (CIA), la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) y a la Oficina Federal de Inteligencia (FBI, por sus siglas en inglés), aseguran que Rusia actuó de forma encubierta en las elecciones presidenciales, con el objetivo de influir en los electores para que éstos apoyaran Trump y dañar así la campaña presidencial de la demócrata Hillary Clinton.

No sólo eso; también dicen tener "certeza" de que los hackers rusos necesariamente tuvieron el visto bueno del presidente Vladimir Putin.

El Kremlin ha negado haberse entrometido y ha tachado las acusaciones de "tonterías".

Trump, por su parte, ha tildado las denuncias de la CIA de "ridículas" en varias ocasiones.

Trump ha dicho que las sospechas de los servicios de inteligencia sobre el posible papel de hackers rusos durante las elecciones de EE.UU. son "ridículas".

Y se ha negado a recibir los informes diarios de inteligencia -una práctica establecida para un presidente-, alegando que es "una persona lista" y que no los necesita.

Este mismo jueves cuestionó cómo pueden los servicios de inteligencia estar tan seguros del hackeo "si ni siquiera pidieron revisar los servidores de las computadoras" pertenecientes al Comité Demócrata Nacional (DNC).

Ante esto, Biden ha dicho que es "totalmente absurdo" que el presidente electo no tenga fe en los servicios de inteligencia.

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