La semana pasada, la revista médica The Lancet informó del primer caso de transmisión de la viruela del mono de humano a perro, que se produjo en Francia. "Se trata del primer caso conocido de transmisión de humano a animal, y creemos que el primer caso de un perro contagiado", afirmó Rosamund Lewis, directora técnica de la OMS para el seguimiento del virus.
Los expertos eran conscientes de que este salto podía producirse, por lo que las agencias públicas de salud ya aconsejaban a quienes se contagiaban del virus que "se aislaran de sus mascotas".
Desechos ponen en riesgo a animales salvajes
Ahora, Lewis afirma que "el manejo de los desechos es fundamental" para reducir el riesgo de contaminación a roedores y otros animales salvajes. Ya que, cuando los virus saltan de una especie a otra, se corre el riesgo de que muten. "La situación más peligrosa es cuando un virus salta a un pequeño mamífero con una alta densidad de población", explicó a la prensa el director de emergencias de la OMS, Michael Ryan.
Sin embargo, no consideró que las mascotas sean un peligro. "El virus no mutará más rápido si está en un solo perro que si está en un solo humano", dijo Ryan.
Roedores infectaron a monos y estos a humanos...
El término de viruela del mono fue usado tras la detección del virus en 1958 en monos de un laboratorio en Dinamarca, pero el virus también fue encontrado en otros animales, sobre todo en roedores.
La enfermedad fue detectada por primera vez en el ser humano en 1970 y es menos peligrosa y contagiosa que su prima la viruela, erradicada en 1980.
El virus puede transmitirse de animal a hombre, pero la explosión reciente de casos se debe a la transmisión entre humanos por contactos estrechos.
Se han detectado más de 35.000 casos desde principios de año en 92 países, y el virus provocó 12 muertos, según la OMS, que calificó este brote como una emergencia sanitaria mundial.