Le llamaban Snowy ("Nevado") por el pelaje rubio que cubría su rostro. Se cree que era la única cría de 399, una osa parda que vive en el Parque Nacional Grand Teton, en Wyoming (Estados Unidos).
Esta cría de una especie protegida por leyes federales murió aparentemente atropellado por un conductor que se dio a la fuga tras el incidente.
Su madre fue vista intentando inútilmente curarle las heridas.
A sus 20 años, es poco probable que 399 pueda tener más cachorros.
Esta osa es bien conocida por los visitantes y fotógrafos que frecuentan el parque porque durante muchos años ha jugado con sus crías a la orilla de la carretera.
En años anteriores, ha dado a luz a tres cachorros en una misma temporada.
Tras conocerse la noticia, muchos han expresado su pesar y su rabia en las redes sociales.
"El cachorro de 399, conocido como Snowy o Spirit por los admiradores de los osos del parque Grand Teton, era adorado por sus travesuras y claramente por su blanco rostro y será extrañado por muchos", dijo en su página de Facebook el grupo de Defensores de la Vida Salvaje de Wyoming.
El problema de las rutas
Los funcionarios del parque emitieron un comunicado urgiendo a los visitantes a obedecer los límites de velocidad y a tener especial cuidado al amanecer y al atardecer, cuando es más probable que los animales salgan.
En el texto informaron que el mismo día de la muerte de Snowy falleció también una osa negra adulta, que también había sido golpeada por un vehículo.
En lo que va de año, unos 37 animales de gran tamaño han muerto en el Grand Teton tras ser arrollados por los conductores.
Según National Geographic,más de 100 animales de gran tamaño mueren cada año en las carreteras de ese parque.
El Servicio de Pesca y Vida Salvaje de Estados Unidos prevé remover a los osos pardos de la lista de especies en peligro.
También de acuerdo con National Geographic, en la actualidad hay entre 600 y 1.000 osos pardos en los parque nacionales de Yellowstone y del Grand Teton.