La policía brasileña allanó el jueves el domicilio del ministro de Agricultura, Blairo Maggi, en Brasilia, y realizó decenas de requisas relacionadas con investigaciones de corrupción, informaron fuentes oficiales y constató un reportero de la AFP.
Los agentes se presentaron a primeras horas del día en la residencia de Maggi en la parte sur de la ciudad y se retiraron poco antes de las 09H30 con una computadora y un sobre con documentos.
La Policía Federal (PF) indicó en un comunicado que 270 agentes participaron en 64 allanamientos ordenados por el Supremo Tribunal Federal (STF), que trata casos de políticos con fueros privilegiados, como ministros y legisladores.
La mayoría de las requisas se llevaron a cabo en Mato Grosso (centro-oeste), un rico estado agrícola, del cual Maggi, de 61 años, fue gobernador de 2003 a 2006.
La estatal Agencia Brasil indicó que la PF también llevó a cabo búsquedas en el gabinete del diputado Ezequiel Fonseca (del partido de derecha PP) en la Cámara de Diputados.
El portal G1 publicó un documento del STF que vincula a Maggi a prácticas de "crímenes de corrupción, lavado de dinero y organización criminal" en Mato Grosso.
Un video filmado en secreto y difundido por TV Globo el 25 de agosto mostró a varios políticos de Mato Grosso enfundando fajos de dinero presuntamente ilegal en sus bolsillos o en mochilas y maletas.
El video fue entregado a la justicia por otro exgobernador de Mato Grosso, Silval Barbosa, que reveló a las autoridades detalles de la existencia de una organización criminal en la cúpula de ese estado.
Barbosa implicó entonces a Maggi en el esquema, pero el político y terrateniente, apodado "el rey de la soja", negó terminantemente cualquier acto ilícito.
El ministro volvió a proclamar su inocencia en un comunicado divulgado antes del mediodía. "Nunca cometí o autoricé acciones (...) para obstruir a la justicia" y "jamás utilicé medios ilícitos en mi vida pública ni en mis empresas", afirma la nota.
Cerca de un tercio del gabinete ministerial del presidente Michel Temer es actualmente objeto de investigaciones por corrupción. El propio jefe de Estado fue acusado de "corrupción pasiva" por Janot, quien esta semana podría pedir su inculpación por obstrucción a la justicia o formación de organización delictiva.
