Una historia de sobrevivencia extrema es la que le ha tocado vivir al joven estadounidense Mason Wells. Con 19 de años de edad ya ha vivido en carne propia tres atentados terroristas.
Este muchacho se encontraba en el aeropuerto de Bruselas junto a otros dos compatriotas debido a que fueron a Bélgica en en su rol de misioneros mormones.
“Este es su tercer ataque terrorista”, contó Chad Wells, padre del joven a ABC News, relatando que estuvo con él a una cuadra de los bombazos ocurridos en la maratón de Boston en 2013.
Mientras que para los ataques en París el año pasado su familia se encontraba en la ciudad, siendo testigos de la barbarie y miedo que se vivió.
Debido a las dos explosiones ocurridas en el aeropuerto de Bruselas, Mason resultó con una rotura del tendón de Aquiles, además de quemaduras de segundo y tercer grado en el rostro.
“Le he dicho ante todo que sea siempre consciente de sus alrededores, que tenga mucho cuidado cuando está viajando y ser muy observador de la gente que lo rodea”, contó Kimberly Wells, madre del muchacho.
"Fue bendecido por Dios de manera significativa. Vemos una bendición por el presente, no una terrible maldición”, señalaron en la familia.
