El Departamento de Estado norteamericano deberá revisar por orden de un juez cerca de 15.000 e-mails de un servidor privado de la candidata demócrata Hillary Clinton que ésta usó cuando era secretaria de Estado y determinar cuáles de ellos pueden ser difundidos, informó el mismo ministerio.
El FBI encontró los 14.900 documentos en el marco de su investigación sobre el manejo de Clinton de información clasificada. Los investigadores devolvieron los e-mails al Departamento de Estado, que debió cederlos como parte de un pedido de información pública, indicó el portavoz Mark Toner.
Sin embargo, el Departamento de Estado debe evaluar primero qué e-mails están relacionados con el trabajo y qué información puede ser retenida por cuestiones de seguridad. También debe determinar cuáles de los nuevos e-mails detectados por el FBI son distintos de los miles entregados previamente por el Departamento de Estado.
Los abogados del Departamento de Estado se reunirán con un juez el mes que viene para determinar el calendario para difundir los e-mails, que probablemente inicie unas semanas antes de las elecciones presidenciales del 8 de noviembre, en las que Clinton se enfrentará al candidato republicano Donald Trump.
En el ojo del huracán
Clinton se encuentra desde hace rato en el ojo de la tormenta por haber usado su cuenta de e-mail privada cuando era secretaria de Estado para enviar correos oficiales. El FBI investiga el caso, pero recomendó no acusar a Clinton.
Por su parte, la organización conservadora Judicial Watch pidió a la Justicia la difusión de los e-mails. El director del FBI, James Comey, había hablado ya hace semanas de "varios miles de e-mails más" que habían sido eliminados pero podían ser recuperados.
Este lunes de conocieron más e-mails de la Fundación Clinton difundidos por Judicial Watch. Se trata de correos de Huma Abedin, persona de confianza de Hillary Clinton, que crean la sospecha de que donantes de la Fundación Clinton del esposo de la candidata, Bill, tuvieron acceso fácilmente a la entonces secretaria de Estado.
Es así como el príncipe heredero de Bahrein se dirigió a la Fundación en mayo de 2009 pidiendo un encuentro con Clinton después de no haberlo logrado por la vía usual, y tuvo éxito.