Una jirafa mató a una bebé de 16 meses al atacarla al mismo tiempo que a su madre el miércoles en una reserva natural sudafricana por razones aún inexplicables, según fuentes policiales.
El ataque, muy poco habitual para el mamífero más alto del mundo, se produjo unos 270 km al norte del puerto de Durban, en el país zulú (este).
La portavoz de la policía, Nqobile Gwala, detalló a la AFP que una madre de 25 años y su hija de 16 meses fueron atacadas el miércoles alrededor de las 14H00 GMT en la reserva de Kuleni en la región de Hluhluwe y fueron "pisoteadas por una jirafa".
La niña fue llevada a una clínica médica cercana "donde murió".
Su madre fue transportada en helicóptero de emergencia al hospital donde todavía se encontraba en estado crítico el jueves.
La policía ha abierto una investigación sobre este drama. Las jirafas no suelen atacar a los humanos.