El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, aseguró que se inhabilitará de cualquier investigación respecto de la campaña de Donald Trump, luego que reconociera haberse reunido con el embajador de Rusia, Sergey Kisyak
"He decidido inhabilitarme de cualquier investigación existente o futura que estén relacionadas con la campaña del Presidente de Estados Unidos", dijo.
En todo caso, agregó que "esto no debe ser interpretado como la confirmación de la existencia de ninguna investigación".
Sessions se reunió dos veces con el diplomático, en julio y septiembre de 2016, pero aseguró que lo hizo como Miembro del Comité Servicios Armados del Senado y no como parte de la campaña presidencial.
La situación provocó que una serie de parlamentarios demócratas y, luego, republicanos exigieran su renuncia.
Sobre los encuentros, el secretario de Justicia manifestó: "No recuerdo mucho de mi conversación con el embajador. Sí me acuerdo que le dije que había ido a Rusia en 1991 con mi grupo de iglesia. Hablamos un poco sobre terrorismo".
Consultado por la razón de no haber informado de estas citas al Senado, durante su proceso de confirmación, añadió que "en retrospectiva, debí haber dicho que me reuní con un oficial ruso un par de veces".
"Mis respuestas fueron honestas y correctas", agregó, dando a entender que creía que las consultas se referían solo al período de campaña.
"Nunca tuve reuniones con operativos o intermediarios rusos sobre la campaña de Trump", subrayó.
Horas antes de la conferencia de prensa de Sessions, Trump manifestó su total confianza en el fiscal general y que no sabía de sus citas con el embajador de Rusia.