AFP
El jefe de las FARC, Rodrigo Londoño (Timochenko), dijo este domingo que existe un "compromiso" para refrendar el nuevo acuerdo de paz sellado con el gobierno de Colombia a través del Congreso, luego de que el pacto original fuera rechazado en un plebiscito.
"Ese es el compromiso que se ha hecho y esperamos que el Congreso esté a la altura de lo que la patria le está pidiendo. Necesitamos refrendar ese acuerdo para comenzar a sentar las bases y sembrar la semilla de la reconciliación y la paz", dijo Timochenko al ser preguntado por RCN Televisión sobre si el pacto de paz será refrendado en el Parlamento.
El líder guerrillero destacó que las ventajas de este mecanismo de refrendación es que "es el que está más a la mano y el que es más rápido".
"Yo creo que entre más tiempo se dilate la refrendación del acuerdo, más espacio se le va dando a los sectores que no quieren la paz", añadió.
Timochenko también dijo que la firma del acuerdo, que deberá darse en los próximos días, se está "alistando" y que tenía que "empacar la maleta para salir hacia Bogotá" para rubricar el acuerdo.
El gobierno, sin embargo, dijo este mismo domingo que aún no está definida la fecha ni el lugar donde se firmará.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) alcanzaron hace una semana en La Habana un segundo acuerdo de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos, en el que incluyeron peticiones de la oposición, luego de que el primero fuera rechazado en un plebiscito el 2 de octubre.
Santos dijo que el nuevo pacto sería presentado este miércoles al Congreso para su discusión y, aunque también se había mostrado favorable a que fuera refrendado por el Parlamento, donde cuenta con apoyo mayoritario, aseguró que aún restaba acordar este asunto con las FARC.
Las partes han insistido en la necesidad de una rápida refrendación e implementación. Especialmente luego de que esta semana se conociera de la muerte de dos miembros de las FARC en presuntos enfrentamientos con el Ejército, a pesar del alto al fuego que decretaron el pasado 29 de agosto.
Las negociaciones de paz buscan poner fin a un conflicto armado de medio siglo en el que también han participado otras guerrillas, paramilitares y agentes estatales con saldo de al menos 260.000 muertos, 60.000 desaparecidos y 6,9 millones de desplazados.
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