En la tarde del pasado viernes fueron encontrados con vida los cuatro niños desaparecidos en la selva del Guaviare, Colombia, quienes sobrevivieron por 40 días tras la caída de una avioneta.
La felicidad del hallazgo de los menores desaparecidos por 40 días se vio empañada por la desaparición de Wilson, el perro del Ejército colombiano que los guió a los pequeños.
Los menores son Lesly Mucutuy, de 13 años; Soleiny Mucutuy, de 9; Tien Noriel Ranoque Mucutuy, de 4, y Cristin Neriman Ranoque Mucutuy, fueron los únicos sobrevivientes del accidente. Una vez se tuvo constancia de la desaparición se dio inicio a la “Operación Esperanza”.
Los primeros indicios del paradero de los cuatro niños fueron hallados por Wilson, un pastor belga de seis años y medio de las Fuerzas Armadas especializado en búsqueda y rescate: Halló una mamadera, restos de frutas y unas tijeras, devolviéndole la esperanza a los rescatistas sobre el bienestar de los pequeños.
De acuerdo con lo comentado por el coronel Gustavo Narváez Orozco, desde el 18 de mayo Wilson emprendió una nueva búsqueda de los niños y dos días después tuvo una “extraña reacción”, sumergiéndose en la selva, presuntamente porque habría percibido algo. Desde entonces los equipos de búsqueda lo veían, pero no podían atraparlo.
El último avistamiento del pastor belga fue el 6 de junio, “quien lo vio, lo vio un poco flaco. Intentaron acercarse con comida, llamados y una perrita para que le buscara juego. Apenas nos vio, huyó y esa fue la última vez que tuvimos contacto con él”, dijo Narváez.
“Sí, es que él venía, nos miraba, él venía, nos miraba y en un momento u otro se desaparecía. Se perdía otra vez, no lo volvíamos a ver. (…) Wilson estaba comunicando algo, pero también como aparte del susto, no quería dejarse coger. Él tenía un susto por algo, pero sí, él intentaba comunicarse con nosotros”, mencionó Carlos Villegas, miembro de la Defensa Civil de Rionegro.
Además de Wilson, hay otros tres perros de las Fuerzas Armadas desaparecidos.
El comandante Narváez sostuvo que “a los perros solo les falta hablar y en algunas situaciones crean una gran afinidad con los niños. Por eso no es descabellado que haya encontrado a los niños y que se haya sentido en manada y los haya protegido”.
“Este animal está educado para comer su concentrado, pero tiene su instinto que se despierta en ciertos momentos. Ojalá se le haya despertado en la selva con animales de presa que haya podido cazar. La fe intacta y la esperanza también por recuperar a Wilson”, agregó.
El general Hélder Fernán Giraldo Bonilla comentó tras el hallazgo de los cuatro niños desaparecidos que “nuestra premisa como comandos: Jamás se abandona a un compañero caído en el campo de combate. Avanza la Operación Esperanza en la búsqueda de nuestro canino Wilson, que haciendo rastreo y en su afán de encontrar a los niños se aleja de las tropas y se pierde".
“Nosotros tenemos un dicho: ‘No dejamos ningún comando atrás’, mucho menos a nuestros menores, mucho menos dejaríamos a Wilson. Pero también somos conscientes de lo complejo que es encontrarlo en lo profundo de una hostil, pero también bendecida selva que tenemos”, añadió.
Por último, el general Bonilla afirmó que “hemos decidido plantear una estrategia para garantizar continuidad operacional en la zona. Por ahora simplemente el objetivo es encontrarlo, pero habrá un tiempo razonable, alineado con un espacio razonable, lo que sensatamente consideremos que corresponde”.
