Una falla en una válvula de ventilación de las baterías de proa habría sido la causa que provocó la implosión en el submarino militar argentino ARA San Juan desaparecido desde el 15 de noviembre de 2017.

Este dato estaría incluído en un informe final de la comisión investigativa, encargada por el ministerio de Defensa trasandino, que explica que dicha válvula tiene que estar siempre cerrada por cuestiones de seguridad. 

Sin embargo, según detalla el diario Clarín, se estima que durante la tormenta registrada el día de la tragedia, es posible que por una falla o el mal cierre de esa válvula se haya filtrado agua de mar que haya caído sobre las baterías y provocado un cortocircuíto. 

De este desperfecto eléctrico se podría haber originado una chispa que hizo explotar al hidrógeno que se había acumulado en el submarino. 

Es así como la comisión investigadora realizará una prueba hidráulica con la misma pieza pero del submarino Santa Cruz, que se encuentra en reparaciones, para comprobar la hipótesis planteada y entregar un resultado en el informe final de la comisión de Defensa que será presentado a fines de agosto. 

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