Las 4.197 nuevas muertes elevan el total de fallecimientos en India a 238.270 desde el comienzo de la pandemia. En un día, el país contabilizó 401.078 nuevos casos de covid-19, con los que el saldo total se eleva a casi 21,9 millones.
Los expertos, que dudan que las cifras oficiales reflejen la realidad, estiman que el pico de contagios en el país podría alcanzarse a finales de mayo.
La situación en Nueva Delhi y Bombay se está estabilizando, con el envío de cilindros de oxígeno y el aumento de camas en los hospitales, pero el coronavirus se está propagando rápidamente en los estados del sur y las zonas rurales.
Karnataka ordenó un confinamiento de dos semanas a partir del lunes en un intento por detener la propagación del virus.
Bangalore, que contabilizó 1.907 muertes por coronavirus en abril, registró más de 950 en los primeros siete días de mayo. Se atribuye el aumento de la tasa de mortalidad a la falta de oxígeno y de camas en cuidados intensivos.
La ciudad de nueve millones de habitantes impuso sus propias restricciones a la circulación el 25 de abril, pero no ha logrado revertir la curva.
Los casos y muertes por coronavirus también se han disparado en el estado de Bengala Occidental desde las elecciones, marcadas por grandes mítines políticos.
Su principal ciudad, Calcuta, sufre escasez de oxígeno y camas.
